domingo, 28 de febrero de 2010



Estamos en el bus viajando de Manchester a Glasgow. Entre dormidas y abridas de ojos hay unos paisajes increíbles. Es un viaje de 4 horas y se lo toman con mucha seriedad. Es un laargo viaje. Así que se recomienda: (con dibujitos ilustrativos que no podré mostrarles)
- Bend and straighten your legs, feet and toes
- Press the balls of your feet down hard against the floor
- Perform regular upper body movements and breathing exercises to relax the back and shoulders.
- Make sure you drink water regularly to avoid dehydrated
- Avoid sitting with your legs crossed for more than a few minutes
- Avoid wearing tight clothing or anything that may be uncomfortable or restrict your circulation.
- Take advantage of any breaks by getting off the coach stretching your legs

Hicimos un break de 25 minutos para descansar. En argentina ni en los viaje de 20 horas.
Manchester no nos afecto demasiado. Tal vez era que quedamos demasiado afectadas por Liverpool. Nos terminamos quedando 5 días en Liverpool y 1 día y medio en Manchester. Nos encariñamos tanto con la gente de Liverpool que nos quedamos un día más a celebrar el cumpleaños de Mitch.
La cuestión es que nos hospedamos con Ali, una estudiante de historia en Liverpool, que vive en la residencia de la universidad. La mayoría estaba en primer año así que tenían esa actitud relajada y de diversión y nuevas experiencias que da el primer año. Nos contagiamos rápidamente de todos, y nos divertimos muchísimo claro. Era como una gran comunidad desinteresada pero que todos confiaban en todos y se ayudaban y se distribuían las tareas y las cenas.
Ali nos introducía como Sol and Pepa, entonces claro, los ingleses entendían Salt and Pepper. Finalmente lo adoptamos con nickname e hizo todo más divertido.
El cumpleaños de Mitch era de disfraces, así que optamos por seguir la corriente y disfrazarnos de sal y pimienta. Un disfraz fácil e ingenioso que seguro divertiría a la comunidad. And it did men. Solo tuvimos que comprar una musculosa blanca para sol, hacer una s y una p y vestirnos, sol de blanco y yo de negro.
El último día nos acompañaron Ali, Ollie, Simon y Xander a la estación a tomarnos el micro. Fue una linda despedida. We miss you guys. Je. Aguante la piscina de higado.

Más allá de la buena compañía, Liverpool nos resulto más linda que Manchester. Es más chica y más acogedora. Manchester es más ciudad, con muchos negocios y mucha gente.

En Liverpool hicimos recorrida Beatles. Fuimos a The cavern club que se notaba que había sido un lugar espeluznante y genial pero que ya sólo quedaba un rastro de lo que había sido. Tocaron dos solistas que creemos les pagaban por tocar temas de los Beatles sin importar qué. Era tan clara la diferencia de cuando tocaban un tema de los Beatles a pedido del publico y del club, con cara de ya lo toque mil veces creo que dejó de tener sentido en mi cabeza pero tengo que pagar el alquiler, y cuando tocaban un tema que ellos querían y se notaban los ojos entreabiertos así como, oh sí que buen tema I can feel it man.

Fuimos a bailar a una fiesta electro en una lugar de 4 pistas lleno de escaleras por todos lados y pistas que no se podía ni ver de tanto humo que había. Eso sí, no se puede fumar adentro pero para respetar el aire puro tiran un humo infernal que parece que estás bailando en el cielo o que te acabas de volver ciego. Con ardor de ojos y todo.

En Glasgow nos gusta imitar el acento escocés. Ai mei, significando, yes mate.
El primer día nos recibió Katie, una estudiante de arte que le faltaban dos dedos en cada mano y pintaba y hacía esculturas. Nos llevó a una galería under que pasaban un video bizarrisimo parodiando los colores y el aura e involucraban un gato embalsamado como decodificador. Estuvo bien. Dormimos solo una noche en su departamento porque era medio creepy y frío y dormíamos las dos en un mismo sillón.

Nos enteramos que estaba el festival de cine de Glasgow. No pudimos ver ninguna película porque la que quisimos ver la habían cambiado de día. Sin embargo presenciamos la gran llegada de algún actor de Star Wars que todavía no desciframos quien es. A ver si a ustedes le va mejor. Es james algo. Es negro, viejito, gordito, con anteojos. No sabemos como sería de joven. Lo cierto es que lo esperaban todos con posters y libros de Star Wars para autografiar. Lo tenemos todo registrado en nuestra super cámara. Sol hizo de presentadora y de fondo un tipo en polleras tocaba la gaita a modo ceremonial.

Cosas que perdimos durante el viaje:

- Sol perdió su polar. Sol se compro otro pero, no es el mismo, no es el mismo.
- Sol perdió la bufanda que se compró Pepa en NY. Sol la reemplazo por otra pero, no es lo mismo, no es lo mismo.
- Pepa perdió un guante, por ende tuvo que tirar el otro. Ahora usa los guantes extra de Sol.
- Las dos se olvidaron un Tupper con su comida. El Tupper lo habían comprado en Portugal. Se olvidaron otras tantas comidas en otras tantas heladeras.
- Pepa mordió el guante de Sol y le hizo un mini aujerin en el dedin. Sol insiste en que eso arruina su función térmica y que Pepa arruinó el guante. Pepa rebate con que se cose y ya está. Todavía no se ha resuelto nada. Pepa insiste en comprar otros, Sol no lo acepta.
- Se rompió el alicate de Pepa. Era tan lindo y chiquito. Necesitamos un alicate.
- Ninguna conserva sus toallas originales.
- Nos olvidamos el segundo polar de Sol y el ultra sweater abrigado de Pepa en el bus del aeropuerto a la casa. Aún tenemos esperanzas de recuperarlos.
- Pepa perdió sus auriculares. Igual estaban medio rotos, y American Airlines le habría proveído de otros.
- Pepa no perdió su mp3 pero ya no funciona. Nada como romper su ipod antes de viajar.
- Sol perdió 20 euros.
- Pepa se dejo la bufanda en la butaca del cine. No se dio cuenta hasta pasar por casualidad por las cosas perdidas y verla ahí. Pepa dijo: Ah mira, mi bufanda, que bien.
- Ambas pedieron su virginidad, pero hace tiempo ya.
- Se nos olvido sacar el desodorante de la mochila de mano. La perdimos ante la excesiva seguridad de los aeropuertos. Nada como traficar bombas en desodorantes.
- Habíamos comprado unos platitos muy lindos en Portugal. Ya no queda ninguno de ellos.
- En algún lado que todavía no desciframos quedó el jabón blanco. Nuestras ropas ya no están tan limpias.


Tuvimos una experiencia surrealista el sábado a la noche. Nos fuimos a dormir temprano.
Era un cuarto compartido pero éramos las únicas entonces hicimos un gran despliegue de todas nuestras cosas. Nos dormimos en las camas más lejanas a la puerta que quedaba al fondo de un corto pasillo a la izquierda.
Habrían pasado unas tres horas cuando Sol despierta a Pepa gritando.
- “Pepa, pepa, ¡hay gente!”
Sol se tapa con las sabanas por sobre su cabeza. Sigue gritando debajo de las sabanas algo como mopenibs. Pepa abre los ojos y ve unas siluetas extrañas enmarcadas en la puerta. Al parecer las figuras prenden la luz porque comienzan a irradiar una especie de luz que lastima nuestros ojos. Sol sigue gritando, Pepa sigue tratando de descifrar que está pasando. Ambas estamos muy dormidas. Sol dice:
- Pepa, Pepa, tus cosas, tus cosas.
Pepa piensa algo como, ¿Mis cosas? ¿Y las tuyas?
Pepa logra levantarse y comienza a ordenar las cosas. Mientras tanto sigue viendo todo medio difuminado y habla en ingles explicando la situación. Ve que Sol se levanta al baño para sacar su campera que se estaba secando.
Cuando nos levantamos al otro día ya se habían ido. ¿Habrán estado alguna vez ahí?

1 comentario:

  1. El actor debió ser James Earl Jones, y según lo que vi es el que hizo la voz de Darth Vader.
    Seguro que la experiencia surrealista les paso por juntarse con gente con el nombre "Xander"...

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